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¿Sabí­as que hay un gen culpable de la obesidad?

Sí, ya tienes a quien culpar por esas libras de más.

Quizás te has preguntado por qué con el paso de los años aumentas de peso aunque estás convencida o convencido que no comes mucho más que cuando tení­as 30, ¡al contrario! Ahora eres más consciente de tu salud y hasta sales a caminar media hora cada tarde.

Bueno, quizás podrí­as culpar al gen de la obesidad, un intruso llamado FTO; un gen defectuoso que quien lo tiene tiende a engordar a medida que envejece, según un reciente estudio.

“Las personas que portan una o dos copias de la variante de la FTO muestran una mayor ingesta de alimentos ricos en calorí­as o grasos a medida que envejecen”, explicó el Dr. Madhav Thambisetty, autor principal del estudio.

Los expertos plantean que las personas con este gen, que participaron en el estudio, presentaron una función reducida en ciertas regiones del cerebro que gobiernan la impulsividad y la percepción de la textura y el sabor de la comida; lo que provoca sin duda que sea mucho más difí­cil para ellos controlar lo que comen y por ende mantener un peso adecuado, aun cuando están conscientes y motivados para hacerlo.

Entonces mi pregunta es: ¿Podemos luchar contra nuestro organismo? ¿Le ganaremos la batalla a esa maquinaria perfecta? El Dr. Steven Lamm, director médico del Centro Tisch de Salud de los Hombres del Centro Médico Langone dijo a Medline Plus que esto no deberí­a ser una excusa. “Pero sí­ tiene que ser una explicación parcial de por qué individuos inteligentes y motivados tienen tantos problemas, porque pelean contra su biologí­a, y pelear contra la propia biologí­a es incómodo”.

Los expertos explican que el tener ese gen no es una condena perpetua a la obesidad, que siempre un estilo de vida saludable que incluya ejercicios regularmente podrí­a incluso prevenir el sobrepeso.