Diagnosticada con cáncer en 2004, la mexicana María de los Ángeles Ortiz pensó que era el final de su vida, pero unos meses después, un conductor ebrio la atropelló y como resultado perdió la pierna izquierda. Hoy día es la campeona en lanzamiento de bala en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 y espera, a sus 42 años, revalidar ese título en Río de Janeiro 2016, pues está entrenando con ese objetivo.
María de los Ángeles encontró en el deporte para discapacitados el aliciente para luchar contra el cáncer, contra sus problemas físicos y contra la sociedad. El joven conductor borracho que la arrolló se dio a la fuga junto a sus acompañantes. Para más complicaciones, era el hijo de un conocido político mexicano.
“ El conductor que me arrolló es sobrino de un subprocurador y fue toda una lucha. Yo estaba hospitalizada cuando intentaron secuestrarme, sacarme a la fuerza, porque no consiguieron sobornarme para que firmara un perdón y desistiera de la demanda. No accedí, y vinieron una serie de procesos judiciales que no me llevaron más que a gastar todo el dinero que tenía", afirmó en su momento en una entrevista al periódico La Jornada.
https://www.youtube.com/watch?v=W5Yh7KeE7q8
“Pasé más de dos años litigando el caso. No quería una remuneración económica, sino justicia; que el chico por lo menos pisara la cárcel para que hiciera conciencia, pues estaba en primer grado de estado etílico y abandonó a la víctima. Tras dos años me dieron 32 mil pesos mexicanos (unos 2,000 dólares) por mi pierna y me dijeron: gracias por participar; vete de aquí y deja de hacer ruido”.
Ortiz continuó sus estudios en muletas y se graduó con mención honorífica como agente de aduanas. Su hija Samantha fue también un incentivo para superar la adversidad. “En la mente y en el corazón no hay límites”, señala María de los Ángeles, quien se entusiasmó a practicar deportes porque pensó que eso la ayudaría a mantenerse fuerte físicamente. Como no puede usar prótesis, lanza la bala con un banco de apoyo sujeto a su muslo.
La campeona panamericana, campeona mundial, subcampeona olímpica en Pekín 2008 y ganadora de la medalla de oro en los Juegos Paralímpicos Londres 2012, fue la primera atleta en el mundo en enviar la bala a más de 11 metros, lo que constituye un récord del planeta.
Angie, como la llaman sus amigos, sonríe a la vida y afirma que no hay nada como la voluntad para vencer las adversidades a las que se enfrenta uno en la vida. "El deporte me ha hecho volver a vivir", ese es el lema de la mujer de la sonrisa eterna, capaz de inspirar a todos los que conozcan su historia para ser más fuertes y no dejarse vencer por nada en la vida. Este año la cadena estadounidense ESPN Deportes la seleccionó para un reportaje especial para promocionarlo por la semana de la mujer y el mes del cáncer de mama.
