Fútbol: La violencia es un cáncer, pero se puede curar

La Copa América está a las puertas, mientras la violencia en el fútbol continúa como un cáncer que puede atacar a cualquier país y arruinar cualquier competencia. Así se ratificó en días recientes con los incidentes que dejaron fuera de la Copa Libertadores al club argentino Boca Juniors y a dos aficionados muertos en Honduras.

Lo ocurrido en la cancha de Boca Juniors a mediados de la pasada semana, cuando "barrabravas" del club xeneize lanzaron gas pimienta a los jugadores del archirrival, River Plate, en un partido de Copa Libertadores, provocó un rechazo mundial.

La Confederación Sudaméricana de Fútbol (Conmebol) expulsó a Boca de la actual edición  de la Copa Libertadores, les exigió pagar una multa de 200,000 dólares y castigó a su estadio con 4 partidos sin aficionados presentes, al tiempo que la justicia de Buenos Aires clausuró la mítica "Bombonera" y abrió una causa para castigar a los culpables.

Un presunto hincha de Boca Juniors fue señalado por la justicia como el autor del ataque a los jugadores de River Plate. Un video captado por la cadena Fox Sports, que fue analizado por la justicia y luego difundido al público, permitió identificar al autor material de la agresión y a otros diez hinchas que actuaron como cómplices, según un comunicado de Boca. El club no difundió las identidades.

 

Por otra parte, durante el fin de semana pasado, en Honduras murieron dos personas  y otras ocho resultaron heridas de bala, tras un ataque a seguidores del club de fútbol hondureño Olimpia, quienes se dirigían a ver un juego de su equipo en Tegucigalpa.

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Decenas de seguidores del Olimpia, que tiene su sede en Tegucigalpa, caminaban por la calle cuando fueron atacados por hombres armados que se transportaban en un vehículo y dos motocicletas, según versiones de testigos brindadas a medios locales.

Estos hechos se unen a otros ocurridos este año. En Brasil, ocho personas murieron baleadas el 19 de abril en la sede de los "torcedores" de Corinthians, en un confuso que involucró a traficantes de drogas; mientras que el 30 de marzo un hincha del club Unión de Santa Fe, de la primera división del fútbol argentino, falleció a causa de heridas de bala sufridas en un choque de barrabravas. Estos son solo algunos hechos lamentables ocurridos este año, sin contar que por violencia han sido suspendidos, en sólo cuatro meses, más de 30 partidos en las principales divisiones alrededor del mundo.

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Chile, la Copa América y la ley antiviolencia

El Congreso chileno acaba de aprobar una nueva ley para controlar la violencia en el fútbol, de cara a la Copa América que se iniciará el 11 de junio en ese país sudamericano. La nueva norma modifica la Ley de Violencia en los Estadios, que ahora pasa a llamarse ‘ Ley de derechos y deberes para el fútbol profesional’ y endurece las penas para los hinchas que transgredan el reglamento.

La ley prohíbe el ingreso a juegos de fútbol por hasta cuatro años a los hinchas que cometan delitos o infracciones, y acredita multas de hasta 70 mil dólares a organizadores de partidos como los equipos profesionales que no cumplan con la norma.

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Las autoridades de fútbol tanto en América como el resto del mundo siguen luchando por vencer a la violencia. Sin embargo, saben que sin la cooperación de los gobiernos, los clubes y los hinchas, es difícil acabar con esos vándalos que aprovechan al deporte para cometer sus desmanes.

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