In English | La histórica ley que reduce los precios de los medicamentos recetados, promulgada el año pasado, fue una gran victoria para las personas mayores que enfrentan dificultades para costear sus medicamentos. Sin embargo, la lucha para conseguir que los medicamentos recetados sean más asequibles no ha terminado, dijo Nancy LeaMond, directora de Activismo y Compromiso de AARP, durante una mesa redonda celebrada el lunes sobre el precio de los medicamentos.
AARP se unió a expertos y defensores en materia de salud para esta conversación sobre la Ley de Reducción de la Inflación, en cuya aprobación AARP desempeñó un papel fundamental, que reduce los precios de los medicamentos recetados para los beneficiarios de Medicare. El evento fue organizado por Protect Our Care.
Si bien LeaMond calificó la ley como “un gran paso adelante”, agregó que “todos tenemos mucho que hacer para promover su implementación y continuar avanzando”. AARP continúa presionando para que se apruben leyes, en el Congreso y los estados de todo el país, que ayuden a aliviar aún más los altos costos de los medicamentos, dijo LeaMond ante el panel.
“La razón principal por la que una persona no surte una receta es porque no puede costearla”, dijo.
Muchas personas mayores que reciben Medicare Parte D ya están ahorrando dinero gracias a la nueva ley, que limita los copagos mensuales de insulina a $35 y proporciona vacunas recomendadas por el Gobierno federal de forma gratuita, dijo la Dra. Meena Seshamani, administradora adjunta de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid y directora del Centro para Medicare.
A partir del 2025, los costos de bolsillo de los medicamentos recetados a través de Medicare se limitarán a $2,000, lo que se calcula que ahorrará a casi 19 millones de personas mayores unos $400 al año, dijo Seshamani, citando un informe federal (en inglés) publicado a principios de este mes.
La ley también penaliza a las compañías farmacéuticas si aumentan el precio de sus medicamentos más que la tasa de inflación y, a partir de este otoño, permitirá que Medicare negocie los precios de ciertos medicamentos con las compañías farmacéuticas.
La panelista Sandra Klassen, que sufre artritis inflamatoria y trastornos autoinmunitarios, dijo que tiene esperanzas de que la nueva ley finalmente le brindará alivio del elevado costo mensual de sus medicamentos recetados, pero quiere que Medicare pueda negociar los precios de todos los medicamentos aprobados por la FDA, no solo de unos pocos.
“Soy una jubilada de clase media”, dijo, explicando que no ha podido probar un nuevo medicamento recomendado por su médico debido al costo. “Sería imposible para mí pagar $1,300 más al mes además de los $400 a $500 que ya pago por los medicamentos”.
Mira una grabación del evento (en inglés) y obtén más información sobre las maneras en que AARP está luchando para reducir los precios de los medicamentos recetados.