In English | Los residentes de los hogares de ancianos y centros de vida asistida de Oregón que se identifican como LGBTQ+ tendrán nuevas protecciones a partir de este año, gracias a una legislación apoyada por AARP.
La primera declaración de derechos de los residentes de centros de cuidados a largo plazo LGBTQ+ entró en vigor el 1.º de enero después de que la gobernadora Tina Kotek la promulgara el pasado mes de julio.
La legislación, que AARP Oregón ayudó a aprobar, hace ilegal que los centros discriminen contra los adultos mayores que se identifiquen como lesbianas, homosexuales, bisexuales, transgénero o queer, o aquellos que son VIH positivos.
Según la ley, los centros de cuidados a largo plazo tienen prohibido negar la admisión o hacer asignaciones, transferencias o tomar otras decisiones basadas en la orientación sexual, la identidad de género o el diagnóstico de VIH de una persona. El personal también debe recibir capacitación para comprender las necesidades de los adultos mayores LGBTQ+.
El estado de Nueva York aprobó una ley similar el año pasado.
“Oregón tiene la mayor proporción de población de LGBTQ+ de cualquier estado”, dijo Andrea Meyer, directora de defensa de derechos de AARP Oregón, cuando testificó a favor del proyecto de ley el año pasado. “A pesar del compromiso de Oregón en ser un estado inclusivo, muchos residentes mayores LGBTQ+ de Oregón continúan enfrentando disparidades generalizadas que tienen un efecto negativo en su salud, su resiliencia financiera y su calidad de vida en general”.
Meyer señaló una encuesta estatal del 2021 que muestra que casi el 60% de los residentes mayores LGBTQ+ en Oregón reportaron haber sufrido discriminación durante el último año. Una cuarta parte de los residentes dijeron que sucedió en “centros residenciales y de atención médica”.
Los adultos mayores que se identifican como LGBTQ+ enfrentan desafíos únicos a medida que envejecen. Por ejemplo, son dos veces más propensos que las personas heterosexuales mayores a ser solteros y vivir solos, y cuatro veces menos propensos a tener hijos. Eso significa que a menudo deben depender de alguien fuera de su familia para cuidar de ellos.
Muchos se preocupan por el maltrato —o por verse obligados a ocultar su identidad sexual— si necesitan mudarse a un hogar de ancianos o a un centro de vida asistida, según una encuesta de AARP de adultos mayores LGBTQ+ de 45 años o más.
La ley provee “protecciones críticas que permiten a los residentes de centros de cuidados a largo plazo envejecer con opciones y dignidad, independientemente de su identidad o expresión de género, orientación sexual o diagnóstico de VIH”, dijo Bandana Shrestha, directora estatal de AARP Oregon.
Lee más sobre los adultos mayores LGBTQ+ y mantente al día con nuestro trabajo de defensa de derechos en Oregón. [K(1]Typo in source text: LBGTQ+
Natalie Missakian cubre temas de políticas federales y estatales y escribe el blog AARP Fighting for You Every Day. Anteriormente trabajó como periodista para el New Haven Register y para periódicos de publicación diaria en Ohio. Su trabajo también ha aparecido en AARP Bulletin, The Hartford Business Journal y otras publicaciones.
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